La APDN se reune todos los jueves a las 18:30 en la Facultad de Trabajo Social
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jueves, 21 de abril de 2011

CHARLA - DEBATE

A un año y 6 meses del asesinato de Carlitos Quiroz, seguimos exigiendo justicia.

Charla-Debate 
“¿Jóvenes peligrosos o jóvenes en peligro? La sociedad, el Estado y su relación con laniñez” 

Próximo viernes 22 de Abril - 19 hs 
GAE San Nicolás 56 (Espacio del Grupo de Actores Especiales)

Organiza la Revista AlertaBerta! Y Pergaminenses de Pie contra el Gatillo Fácil

El eje a tratar y reflexionar será la actual situación de la niñez y adolescencia, la respuesta o no del Estado y de la comunidad en su conjunto ante el incumplimiento de los derechos del niño en nuestro país. 

Para lo cual, contaremos con la presencia de:

-Integrantes de la Asamblea Permanente por los Derechos de la Niñez (La Plata)

-Ramiro Geber (abogado de la familia de Carlitos Quiroz, asesinado por la policía en 2009 en Pergamino)

Contaremos también con la presencia de los familiares de Carlitos Quiroz,víctima del gatillo fácil en nuestra ciudad hace ya 1 año y medio.

Como cierre actuara "La bomba callejera" (taller de hip - hop de LaPlata)

La actividad será realizada en conjunto con los redactores de la revista rojenseAlerta Berta, que vendrán este viernes a nuestra ciudad estrenando su 5to número que lleva por eje central la niñez y su relación con el Estado en la actualidad.

lunes, 11 de abril de 2011

BUSCAMOS A BRIAN

BUSCAMOS A BRIAN
El jueves 7 de abril a las 17:00 hs BRIAN EZEQUIEL ENCINA fue dejado por su patrón en Montevideo y 4. Brian se dirigía a la casa de su madre. Nunca llegó a destino.
Algunos comerciantes declaran haberlo visto caminar debajo de la lluvia  por la zona de la Plaza Almafuerte, cercanas las 19:00 hs
Brian tiene 17 años, delgado, 1,70 de altura, pelo oscuro, sufre epilepsia. Vive en el barrio Villa Argüello.
Cualquier información llamar a: 
0221 15 593-8109 / 482-7007 ó 422-4604

martes, 5 de abril de 2011

Allanamientos por trabajo esclavo e infantil en campos de Mar del Plata

Hoy lunes 4 de abril, a partir de las 10 de la mañana, comenzaron los allanamientos judiciales con trescientos efectivos de Gendarmería Nacional producto de una denuncia por explotación infantil y esclava en tres fincas ubicadas en Batán, en las afueras de la ciudad de Mar del Plata. Luego de una investigación de varios meses Gustavo Vera, titular de la Fundación Alameda, presentó el pasado 18 de enero una denuncia ante la Fiscalía General que consta de cámaras ocultas (ver video adjunto) y testimonios con identidad reservada. Las dificultades para registrar lo que muchos marplatenses murmuran sobre estas quintas fueron grandes ya que las fincas de florihorticultura se han convertido en verdaderos campos de concentración totalmente cerrados al exterior. Primero porque la incorporación de personal de nacionalidad boliviana no se hace espontáneamente, sino mediante reclutadores o conocidos directos. Segundo por la protección policial con cuentan estas empresas, ya que ante la menor sospecha de personas ajenas al lugar merodeando, arriba la Policía Bonaerense para pedir documentos y tratar de averiguar las razones de la visita.
Después de infructuosos intentos de ingresar a las fincas, donde no pasan siquiera docentes ni médicos de la zona, se pudo hacerlo disfrazado de Reyes Magos. El sábado 8 de enero se rompió el cerco de la esclavitud cuando varios militantes de la Alameda acompañados por el grupo de Apoyo de Madres de Plaza de Mayo e Hijos de Mar del Plata se camuflaron de Reyes Magos. Tuvieron que avisar primero a la comisaría 8ª de Batán para no levantar sospechas. La excusa fue que eran de un grupo de voluntarios que acercaba juguetes para los niños en ocasión del día de reyes. En la seccional policial se consultó dónde se encontraban los chicos y estos mismos efectivos orientaron a los “voluntarios” hacia las fincas con explotación infantil.
El video que hoy es difundido a los medios de comunicación y que puede encontrarse en http://www.youtube.com/watch?v=2aruz0mma6I, demuestra que es habitual el trabajo de los pibes de 6 a 11 años en las cosechas de morrón, tomate y frutilla. Todos los chicos con los que se habló reconocen que trabajan. También se incluye imágenes de las condiciones paupérrimas en las que se encuentran gran parte de los trabajadores todos ellos migrantes bolivianos, incluso se ve a uno de los niños durmiendo en medio de las plantaciones, probablemente luego de haber trabajado a destajo.
A la Compañía Frutihortícola S.A., más conocida como “El Frutillar”, se la denuncia por malos tratos físicos y psicológicos. Los trabajadores están encerrados, y sólo pueden salir de los campos de la compañía en los festejos de carnaval durante el mes de marzo. Vecinos de la zona describieron al lugar como un verdadero campo de concentración. Como dueño del lugar, figura Andrés Moretti, y el capataz Hernán Arana. Se estima que en este lugar hay cientos de trabajadores de origen boliviano. A ellos se les retiene los documentos de identidad y todos viven en campamentos donde tienen casillas muy precarias. Varias fuentes informativas han denunciado la existencia de abuso sexual y maltrato en los terrenos de la Compañía Frutihortícola S.A.
Por otra parte, los vecinos denuncian la utilización del Bromuro de Metilo, agroquímico prohibido en la mayor parte del mundo, como la quema de plásticos a cielo abierto que realizan a la hora de terminar las cosechas, que representa una peligrosidad para la salud de los trabajadores y quienes viven cercanos al lugar.
A los docentes de la Escuela Nº46, donde van los niños del frutillar a jornada simple, les resulta imposible entrar a las fincas cuando la institución necesita hacerlo para recabar alguna información de alumnos. Lo mismo le ocurre al personal de la Salita de Primeros Auxilios de La Peregrina.
Todo esta situación de esclavitud y explotación infantil ocurre a unos veinte kilómetros de la ciudad de Mar del Plata, en el Partido de General Pueyrredón, en el cordón Frutihortícola de Sierra de los Padres y Batán, zona considerada como uno de los centros de producción frutihortícola más importante del país, que distribuye su producción en el Mercado central y para la exportación.
Las empresas denunciadas y allanadas ahora por orden de la fiscalía Nº2, a cargo de Gustavo Rodríguez, son Compañía Frutihortícola S.A., Quinta Costa Mari y la Quinta Rueda. Se demoró los allanamientos ya que el juez de turno en enero solicitó que la investigación de la Fundación Alameda y las organizaciones de derechos humanos fuera ratificada por una investigación judicial. Entonces el fiscal federal convocó a efectivos de Gendarmería Nacional, quienes luego de dos meses de inteligencia, ratificaron ante la fiscalía lo que la Alameda había denunciado a principios de año. Esto llevó a que el actual juez involucrado en la causa, Rodolfo Pradas, otorgase los allanamientos a las fincas esclavistas y explotadoras de niños.
 
CONTACTO: Gustavo Vera 15 6158 4835 / Patricia Gordon en Mar del Plata 0223 15 4988 997

domingo, 3 de abril de 2011

UN FALLO “SEXISTA Y DISCRIMINATORIO”

Las organizaciones  de Derechos Humanos CIAJ, ELA y la ADC repudian el fallo de los jueces de casación Piombo y Sal Llargués que beneficia a un imputado condenado por cuatro violaciones a niñas menores de edad, absolviéndolo además del delito de corrupción de menores fundamentándose en el prejuicio de que las víctimas pertenecían a “comunidades en las que el nivel social acepta relaciones a edades muy bajas”.
El Colectivo de Investigación y Acción Jurídica (CIAJ), junto con el Equipo Latinoamericano de Justicia y Género (ELA) y la Asociación por los Derechos Civiles (ADC) acompañaran con un amicus curiae el recurso presentado por el Fiscal de Casación ante la Suprema Corte de Justicia de la provincia de Buenos Aires frente a una resolución sexista y discriminatoria firmada por los jueces Horacio Daniel Piombo y Benjamín Ramón Sal Llargués de la Sala I de Casación.

En un fallo polémico los jueces resolvieron reducir a la mitad la condena a prisión a Francisco Domingo Ávalos, fundamentando su resolución en que las niñas  que fueron  obligadas  a mantener relaciones sexuales y quedaron embarazadas, son “mujeres que viven en comunidades en las que el nivel social acepta relaciones a edades muy bajas; que además, poseían experiencia sexual –incluso en yacer con otros hombres-   respecto de las cuales también operó el ejemplo brindado por otros sujetos para convencerlas de tener sexo natural con el objeto de estar en condiciones de concebir un hijo”.


Los magistrados afirman que los hechos sufridos por las niñas no son moralmente edificantes” pero tampoco implican “un quehacer aberrante, repulsivo, que hiera la integridad sexual o que constituya, como se ha dicho, “la pompa de la deshonestidad”.


Los fundamentos expresados por los Dres. Horacio Daniel Piombo y Benjamín Ramón Sal Llargués se basan en prejuicios de carácter sexistas y clasistas.  Esta resolución entiende que el contexto de vulnerabilidad en que se encuentran las víctimas –es decir, ser niñas y pobres-  actúa  como un factor para absolver al imputado del delito de corrupción de menores, y atenuarle la pena por el otro delito impuesto por el tribunal de primera instancia.


Considerar que  las niñas víctimas  habían tenido experiencias sexuales previas y utilizar esto como un  atenuante a la pena impuesta al pastor Francisco Ávalos, pone de manifiesto las concepciones prejuiciosas y discriminatorias en las que los jueces fundan sus resoluciones.


El argumento de los jueces para la absolución del imputado por el delito de corrupción, es que las víctimas pertenecían "a comunidades de un sector social que acepta las relaciones sexuales a baja edad", asentándose sobre el prejuicio de que las decisiones sobre cómo y cuándo ejercer la sexualidad le pertenecen "al grupo social", y no al individuo en particular. Siguiendo el razonamiento de los jueces, la esfera de autonomía sexual de las víctimas se modela de acuerdo a lo que su "sector social" supuestamente acepta. Y subrayamos el carácter de supuesto ya que no explican en qué basan su afirmación.

En esta resolución, como en otras, no sólo se produce un proceso de re-victimización sino de invisibilización de las situaciones de violencia sexual sufrida por niñas y mujeres. En este sentido, el sistema penal actúa como un factor legitimador de estas prácticas así como de los estereotipos de género que las subyacen.
Los criterios que son tenidos en cuenta por el derecho nacional e internacional en materia de derechos humanos para fortalecer la protección legal de las víctimas (condición económica desaventajada, condición de mujer y de niñas menores de 18 años), en esta causa son utilizados por los jueces Piombo y Sal Llargués para asegurar la impunidad de los perpetradores.

Condenamos el accionar de la justicia provincial
Repudiamos las declaraciones discriminatorias, sexistas y clasistas del fallo
CIAJ - Colectivo de Investigación y Acción Jurídica